voy en busca de una última palabra, que
complete el puzzle de los sentidos,
mi rompecabezas de sentimientos,
mi juguete roto de niño chico.
Y es, una muñeca de trapo con remiendos,
la que vencida por la sombra de los tiempos,
y olvidada a la intemperie de los prejuicios,
siente como suyas culpas y malentendidos.